TODAVÍA CREO EN EL AMOR

Cuando uno busca alguien, lo que más uno desea es encontrar que sea una persona que se ajuste a nuestros sueños. Lo real es que hay que estar preparado y dispuesto a encontrar que ese alguien sea una persona sea sincera, amable, cariña, amorosa, empática, simpática, risueña; pero también nos olvidamos que sea resposable, fiel, honrada, puntual, y muchas cosas más que sean parte de la perfección. Ya debemos saber que de todas esas cualidades, solamente algunas apuntan hacia alguien, quizás un tres por ciento de ellas o un cinco por ciento cuando esa persona viene de una buen educación. Ojalá yo pudiera encontrar una chica que abarque por lo menos de un cinco a un diez por ciento. Y si tengo suerte, que tal vez sea de un ochenta por ciento. Pero eso, a la vez, me compromete a que yo sea de un ochenta a un noventa y cinco por ciento para ella, y que a la vez, ambos nos dediquemos a superar esos esquemas hacia el cien por ciento.